Es una alteración en la que los ejes visuales adoptan una posición entre sí distinta a la que se requiere para el estado normal de la visión. De otro modo podríamos decir que es la perdida de la alineación de los ojos.
Aparte del importante problema estético que representa, repercute cuando se trata de niños menores de 5 años, en el desarrollo de la visión del ojo desviado, lo que se denomina ambliopía, más conocida por ojo vago.
El tratamiento de esta enfermedad debe ir dirigida precózmente a evitar la ambliopía, que después de los 6 años de edad puede decirse que es irreversible. Para ello se determinan los probables vicios de refracción ( miopía, hipermetropía, astigmatismo ) y se indica la corrección óptica que demanda cada ojo, para pasar luego a reeducar la visíón del ojo afectado.
Hay complicaciones secundarias a la falta de alineación de ambos ojos que se deberán detectar y tratar adecuadamente, como la fijación extrafoveolar y la correspondencia retiniana anormal, sin lo cual es imposible lograr dicha reeducación. Para este fin utilizamos fundamentalmente prismas y oclusión, lo que por tener un efecto permanente durante la vigilia del paciente, ha demostrado ser el tratamiento más efectivo.
En algunos casos se consigue la alineación de ambos ojos, pero generalmente la restitución es quirúrgica. La cirugía consiste en reforzar y/o debilitar músculos extrínsecos del ojo, siendo necesario, según el grado de desviación, operar uno o ambos ojos.
Es importante puntualizar que no siempre se logra el resultado buscado con un solo acto quirúrgico, y las reintervenciones en estos casos es algo frecuente.